Porque un niño que no pasa miedo es un niño que no sufre
Adiós al miedo. HOLA, FELICIDAD.
Sin susto
Ni disgusto
La salud física y emocional debería abordarse desde el nacimiento hasta el final de la vida; pero no es así porque el DOLOR INFANTIL ha sido desde siempre el gran OLVIDADO.
Pese a los avances de la pediatría y a poseer actualmente una mayor concienciación general, estudios recientes concluyen que el dolor y la ansiedad perioperatorias en la población infantil siguen infradiagnosticados e infratratados.
Es por ello que desde Sedalux no sólo vamos a visibilizar el problema y hacer que importe (“Make pain visible and Make pain matter”) si no que vamos a combatirlo, con tal de lograr un mejor abordaje del dolor en todas sus vertientes: prevención, detección y tratamiento; y así mejorar su atención a todos los niveles.
Consecuencias a
largo plazo del
dolor no tratado
En los niños pequeños y neonatos, el dolor no tratado conlleva un mayor riesgo de producir cambios en su sistema nervioso en desarrollo que predisponen a dolor en etapas posteriores de la vida, que pueden impactar significativamente sobre el rendimiento y la salud, y continuarse hasta la edad adulta.
Estudios sobre dolor crónico infantil revelan que del 11-40% de juveniles experimentan dolores que persisten más allá de los 3 meses, con un impacto funcional significativo tanto para los niños como para sus familias (absentismo escolar, reducción del funcionamiento físico-social o discapacidad, aumento de la angustia psicológica) con consecuencias a largo plazo: tanto para el futuro adulto como para la sociedad y su economía.
Población vulnerable
con necesidades especiales
Si la infancia constituye uno de los grupos de mayor vulnerabilidad, el otro gran grupo donde el dolor no es que sea olvidado sino que parece INVISIBLE es el de los pacientes con TRASTORNOS MENTALES.
Algunos de ellos son: trastornos del control de los impulsos y de la conducta, trastornos generalizados del desarrollo (TGD) o del espectro autista, trastornos por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), trastornos neurocognitivos que afectan la capacidad para pensar y razonar (ej. enfermedad de Alzheimer, demencia, delirios), trastornos afectivos o del estado de ánimo (Ej. Trastornos depresivos, trastorno bipolar), trastornos de ansiedad (trastorno obsesivo compulsivo, trastornos relacionados con el estrés (agudo o postraumático (TEA y TEPT), ansiedad generalizada, agorafobia, claustrofobia…), trastornos psicóticos o esquizofrenia, trastornos de la personalidad que conllevan inestabilidad emocional y comportamientos poco saludables (ej. trastornos límite, antisocial, narcisista…), entre otros.
Aunque resulte difícil de estudiar en todos ellos se observa que, de forma generalizada, el dolor físico o el sufrimiento psicológico es un síntoma muy frecuente.
En la complejidad de abordar la odontología pediátrica en pacientes infantiles con trastornos mentales, la sedación dental en niños emerge como una solución invaluable. Para aquellos pequeños que enfrentan desafíos como trastornos del control de los impulsos, del espectro autista o trastornos por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), la importancia de la odontopediatría con sedación se magnifica.
Desde Sedalux desarrollamos un plan específico de abordaje del dolor en todos estos grupos, para la que realizamos una exquisita selección y acreditación de los profesionales capacitados (por su formación específica y experiencia diaria en grupos de riesgo) para la práctica de la sedación consciente en odontología pediátrica, y daremos el reconocimiento o aval a aquellas clínicas o centros cuya actividad y recursos se centren en ofrecer una atención particular a dicha población especial.
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